Los perezosos, los campeones del buceo: pueden aguantar más que los delfines bajo el agua.

Los perezosos son conocidos por ser los animales más lentos y perezosos del mundo, pero lo que quizás no sabías es que también son unos excelentes nadadores y buceadores. Estos mamíferos, que habitan las selvas tropicales de América Central y del Sur, pueden contener la respiración hasta 40 minutos bajo el agua, casi el doble que los delfines, que son considerados los reyes del océano. ¿Cómo es posible que un animal tan apático y dormilón pueda superar a uno tan ágil y activo en el arte de la apnea? La respuesta está en su increíble adaptación al medio acuático, que les permite reducir su metabolismo y su frecuencia cardíaca a niveles mínimos, así como aprovechar al máximo el oxígeno que almacenan en sus pulmones.

Los perezosos pasan la mayor parte de su vida colgados de las ramas de los árboles, donde se alimentan de hojas y brotes tiernos. Su movimiento es tan lento que las algas verdes crecen en su pelaje, lo que les proporciona un camuflaje natural contra los depredadores. Sin embargo, una vez a la semana, los perezosos deben bajar al suelo para defecar y orinar, lo que los expone a un gran riesgo.

Para evitar ser cazados por jaguares, águilas o serpientes, los perezosos han desarrollado una estrategia sorprendente: se lanzan al agua y nadan hasta el otro lado del río, donde pueden encontrar otro árbol seguro. Los perezosos son capaces de nadar tres veces más rápido que lo que caminan en tierra, gracias a sus largos brazos delanteros, que les sirven de remos. Además, pueden contener la respiración bajo el agua durante mucho tiempo, lo que les permite sumergirse y evitar ser detectados por los ojos de sus enemigos.

Los perezosos tienen pulmones como los humanos, pero no pueden respirar por la boca, sino que lo hacen por una abertura en la parte superior de la cabeza llamada espiráculo. Cuando los perezosos emergen a la superficie del agua, abren el espiráculo y exhalan el aire viejo antes de inhalar aire fresco. Pueden permanecer sumergidos durante varios minutos a la vez antes de tener que volver a la superficie para respirar.

Para lograr esta hazaña, tienen una serie de adaptaciones fisiológicas que les permiten optimizar el uso del oxígeno en su cuerpo. Por un lado, tienen más alvéolos y capilares en sus pulmones que los humanos, lo que les permite un intercambio de gases más eficiente entre los pulmones y la sangre. Por otro lado, tienen más glóbulos rojos en la sangre, lo que les permite transportar más oxígeno a los órganos del cuerpo.

Además, pueden reducir el flujo sanguíneo a los órganos no esenciales, como los riñones o el sistema digestivo, para asegurarse de que el oxígeno llegue a los órganos vitales, como el cerebro y los músculos. También pueden reducir su metabolismo y su frecuencia cardíaca a menos de un tercio de la normal, lo que les ayuda a ahorrar energía y a contener la respiración durante más tiempo.

Los perezosos son, sin duda, unos seres extraordinarios y peculiares, que nos sorprenden con sus habilidades y adaptaciones al medio acuático. Estos animales, que parecen tan indefensos y vulnerables, son en realidad unos campeones del buceo, que pueden aguantar más que los delfines bajo el agua. Nos demuestran que la naturaleza es sabia y que cada especie tiene sus propios secretos y encantos.

Estos animales en la actualidad se encuentran en peligro de extinción por la pérdida de su hábitat, la caza furtiva y el tráfico ilegal. Por eso, es importante protegerlos y respetarlos, y no utilizarlos como accesorios para fotografías de turistas, como ocurre en algunos lugares. Ellos pertenecen a la naturaleza, y solo allí pueden vivir felices y libres.